Los ordenadores gamer son muy polivalentes y nos permiten jugar a cualquier tipo de juego, pero tienen un problema en cuanto a la estética. Las torres no son especialmente estéticas, aunque se ha avanzado mucho en este aspecto, y por eso a nadie se le ocurre poner una torre en el salón, junto a la tele.
En ese aspecto, las videoconsolas han ganado la partida, pues su estética está mucho más conseguida, lo que hace que se puedan colocar en cualquier sitio sin que desentonen.
La solución, si quieres jugar con el ordenador en el salón, es el Alienware Alpha, un ordenador pensado para los gamer más exigentes, pero con una estética muy cuidada que hace que parezca una videoconsola.
Su aspiración a imitar a las videoconsolas es tal, que su interfaz se puede manejar desde un gamepad, sin necesidad de que usemos un teclado o un ratón, por lo que su vocación de ordenador se salón es clara.
En posible que viendo la caja alguien crea que es un ordenador bonito, pero que los juegos exigentes no van a funcionar en el Alienware Alpha. Si es así se equivoca, pues puede «mover» cualquier juego en HD sin problemas.
Esto lo hace gracias a la gráfica, una Nvidia GeForce GTX 860M con dos 2GB de memoria GDDR5, a la que no se le resiste ningún juego actual ni los de los próximos meses o años, dependiendo del procesador que elijamos.
El Alienware Alpha se puede configurar. La gráfica es fija, pero podemos poner el procesador que queramos, desde un i3 a un i7. La RAM puede llegar a los 8 GB (aquí debería permitir poner 16 GB), y el almacenamiento puede llegar a los 2 TB.
En cuanto a la conectividad, viene con WiFi AC, aunque en este caso no es demasiado importante, pues creo que un ordenador de este tipo debería estar conectado con cable.