Quién nos lo iba a decir a nosotros, pero ahora resulta que Microsoft es el ejemplo a seguir en cuanto a actualizaciones de su sistema operativo para móvil.
La empresa que hace unos años representaba todo lo malo de la informática, para muchos usuarios, ahora resulta que es la que más se preocupa por sus clientes.
Esto viene porque acaban de anunciar que todos los smartphones que tengan Windows Phone 8.1 se van a actualizar a Windows 10, algo que no es muy común en otros otros fabricantes, que sólo actualizan una ves su sistema operativo.
En mi caso tengo un Nokia Lumia 520, que es un smartphone de gama baja que lleva Windows Phone como sistema operativo. Vino de fábrica con Windows Phone 8.0 y lo actualicé a Windows Phone 8.1 no hace mucho.
Con esta noticia veo que lo voy a poder actualizar a Windows 10, lo que significa que gracias al fabricante voy a poder actualizar mi smartphone dos veces, lo que le va a alargar mucho la vida útil, pues podré tener lo último en mi smartphone, y eso a pesar de que el mío es un modelo de gama baja, y en concreto el modelo de acceso de Nokia, ahora Microsoft.
Para la actualización parece que tendremos que esperar hasta mediados del año que viene, que es cuando se va lanzar el nuevo sistema operativo. Además, el lanzamiento vendrá acompañado de nuevos dispositivos, en este caso ya sin la marca Nokia.
De esta política de actualizaciones podrían aprender otros fabricantes, que apenas actualizan sus smartphones una vez, por lo que al poco tiempo hay que comprarse otro.
Con estos gestos Microsoft gana clientes para sus terminales, que por experiencia os puedo decir que funcionan genial, pero que sufren el problema de que su tienda de aplicaciones es muy limitada si la comparamos con la de Android o la de iOS.