En recientes declaraciones durante las últimas semanas, General Motors manifestó su interés en la compra de la compañía Lyft; según una persona informada sobre la situación. Después de realizar una solicitud para contactar otros compradores potenciales estratégicos, Lyft rechazó el enfoque de General Motors; con lo que decidió elevar una nueva ronda de financiación en su lugar.
Según se supo, General Motors mencionó un precio que estaba dispuesto a pagar, pero este no pareció ser aceptado; y no está claro cuál parte inició la oferta. General Motors pagó $500 millones para optar por una participación del 9% en Lyft, a principios del año; valorando la compañía en $ 5.5 mil millones. De hecho, el presidente de GM pertenece a la junta directiva de Lyft.
Esta oferta indica la seriedad de General Motors sobre el aumento de su inversión en la compañía; puesto que Lyft requeriría probablemente miles de millones de dólares en nuevas inversiones. En pocas palabras, la información obtenida sugiere que el interés de General Motors en la compañía se extiende más allá de una simple alianza.
Ni General Motors ni Lyft han emitido comunicados oficiales sobre la adquisición
Ambas compañías han manifestado una continua emoción y entusiasmo respecto a su alianza, hasta el momento. Recientemente, incluso, su programa Express Drive se ha visto expandido debido a estos acuerdos. Esto ofrece a los conductores potenciales de Lyft que no poseen sus propios autos calificados, la posibilidad de rentar vehículos para su utilización dentro de la compañía.
Sin embargo, General Motors se ha negado a comentar sobre cualquier tipo de adquisición, de manera reciente; sin embargo, solo optó por seguir manifestando su amplio agrado sobre su alianza estratégica con Lyft y todos los buenos frutos que estaba dando.
Por otro lado, en otros reportes, se supo que ambas compañías planean invertir en la prueba de taxis de conducción propia; en este caso, unos Chevy Bolt con sistemas autónomos instalados. Estas pruebas en los autos mencionados usando tecnología adquirida por General Motors ya han empezado a ocurrir en San Francisco y Arizona.