Lo que se catalogó como un éxito en ventas, pronto se volvió en uno de los problemas más grandes que Samsung, ha transitado como fabricante de teléfonos inteligentes. Durante el mes de agosto, los primeros reportes de Galaxy Note 7 que se incendiaban, empezaron a surgir. Pero la situación, se puso peor cuando aparecieron los primeros phablets que empezaron a explotar de manera inesperada; lo cual creó una situación alarmante para la surcoreana.
Rápidamente, la compañía se puso en marcha para llevar a cabo su programa de reemplazos. Según las estadísticas, más del 60% de los adquisidores de su dispositivo, lograron cambiar por uno a prueba de fallas. Pero tal parece que, este nuevo lote de phablets, también contenía unidades defectuosas. Tras parar la producción de manera temporal hace un par de día; Samsung ya ha tomado la decisión de interrumpir la producción de sus Galaxy note 7 de manera permanente.
El Galaxy Note 7 se despide del mercado sin haber cumplido 3 meses desde su lanzamiento
Esta decisión, viene en conjunto con la de algunos minoristas que se encargaban de vender el Galaxy Note 7; quienes tomaron la iniciativa de eliminarlo de su stock debido al peligro que representaba para los consumidores.
Desde un Galaxy Note 7 que se incendió en las manos de una joven de 13 años, hasta uno que explotó en pleno vuelo, han sido solo algunos de los nuevos incidentes que se han presentado con las unidades de reemplazo.
Samsung, quizás haya tomado la decisión correcta al darle de baja a su Galaxy Note 7. Con esta medida, la surcoreana estaría centrándose más en sus próximos dispositivos; tales como el Galaxy S8 que se estará anunciando durante el próximo año.
Hasta los momentos, Samsung no ha revelado las medidas que estaría tomando con aquellos compradores con órdenes pendientes; aunque probablemente, lleve a cabo otro programa, donde los usuarios podrían recibir el reembolso de su dinero.