En casa casi todos tenemos uno o varios relojes de pared, que ahora mismo sirven más como decoración que para dar la hora. Yo mismo tengo uno desde hace casi treinta años que es como un plato de cocina pintado a mano.
Sin embargo, las nuevas tecnologías se están implantando en toda la casa y hasta ahora los relojes de pared no habían sufrido el ímpetu de éstas, algo que acaba de ocurrir.
El responsable es el Coolest Clock, un reloj que está buscando financiación colectiva para poder salir al mercado en diciembre, por un precio de unos 179 dólares, un precio correcto para lo que hace.
El Coolest Clock tiene poco que que ver con un reloj de pared tradicional. De hecho, si no lo vemos funcionar parece más una lámpara de esas que se ponen en las paredes para dar luz ambiente que un reloj.
El secreto de este reloj es que en realidad no hay reloj físico, puesto que se proyecta en la pared, usando para ello un proyector de tiro corto, que está destinado a sacar imágenes con una gran resolución.
El reloj se puede manejar con el smartphone, a través de una aplicación, la cual sirve para que cambiemos el tipo de reloj, pudiendo ponerlo a nuestro gusto.
Por supuesto, el Coolest Clock no se queda en proyectar un reloj en la pared, ya que en la imagen proyectada podemos ver notificaciones de redes sociales, titulares de noticias, y gracias al GPS del móvil, siempre que nosotros queramos, las personas que están en casa podrán ver en todo momento dónde estamos.
También nos dará información del tiempo, lo que siempre es muy útil, alarmas, e incluso las horas en distintos países del mundo, algo muy útil si tienes familiares o amigos viviendo fuera, o si como es mi caso, trabajas con personas de distintas partes del mundo.