A pesar de que somos muchos, yo me incluyo entre ellos, los que pensamos que el mundo de los cuantificadores no puede dar más de sí, parece que la tecnología está empeñada, una vez más, en dejarnos en evidencia. Más que nada porque gracias a Ear-O-Smart vamos a poder tener una vuelta de tuerca más dentro de este mundillo de gadgets imposibles desde el momento en el que hemos sabido que la ubicación de este cuantificador son nuestras orejas. Y es que lo que pretende es que lo llevemos de pendientes y poder así medir algunos parámetros de nuestro cuerpo.
El primer objetivo de este Ear-O-Smart está bien claro y es que nos olvidemos de una vez por todas que lo llevamos puesto. Sin embargo, y a pesar de que la idea puede cuajar en un futuro no es menos cierto que de momento solo se han creado tres modelos para evaluar cuáles pueden ser todas las prestaciones que pueden ofrecer y si estas son tan completas como se cree en un principio. De todos modos, y hablando ya de todo lo que estos «pendientes» pueden medir, hay que decir que pueden controlar nuestros pasos, nuestro ritmo cardiaco así como contar calorías como lo pueden hacer los cuantificadores de más alto nivel.
Además, y como una buena conectividad no puede faltar, con Ear-O-Smart viene una aplicación con la que podemos interactuar con una base de datos en la que volcaremos nuestroa datos para realizar comparativas de todo tipo de medir así los resultados, por ejemplo, de nuestro entrenamiento. Dicho todo esto, hay que añadir que el elemento más complicado de desarrollar será la batería por las reducidas dimensiones que esta debe tener. No obstante si todo funciona como se espera, lo más normal es que esté en las tiendas por un precio que oscilaría los 125 dólares. ¿Te seduce la idea?