A pesar de la gran catástrofe ocasionada por los Galaxy Note 7 explosivos, Samsung no ha perdido la compostura ante este inconveniente. En lugar de señalar con el dedo a sus proveedores de baterías, la compañía puso en marcha una serie de medidas que ayudarían a los usuarios, a identificar si su phablet, era una de las tantas defectuosas. A su vez, la surcoreana también lanzó una actualización vía OTA; la cual cambió el clásico medidor de batería blanco, por uno de color verde; que ha sido distribuido no solo en la pantalla de inicio, sino también, en la de bloqueo.
La identificación de los dispositivos defectuosos, ha sido de gran ayuda. Ahora, los planes de Samsung, serán los de llevar a cabo los reemplazos. Dicha labor, empezará a llevarse a cabo a partir del día de mañana. Esto será posible gracias a que, la compañía, ha enviado medio millón de Galaxy Note 7 a algunos minoristas de los Estados Unidos.
Los adquisidores de un Galaxy Note 7 defectuoso podrán cambiarlo por uno a prueba de fallas
Este gran despliegue de Galaxy Note 7 totalmente seguros, se estará dando en algunos de los minoristas más importantes de los Estados Unidos; tales como Best Buy y otros más. Aquellos usuarios que deseen cambiar su dispositivo defectuoso, podrán hacerlo a partir del día de hoy.
Por otro lado, los que no deseen formar parte de esta gran iniciativa tomada por parte de Samsung; entonces deberán esperar al programa de cambios que la surcoreana, llevará a cabo posteriormente. Mientras tanto la compañía les recomienda a dichos usuarios, apagar su Galaxy Note 7 por los momentos; ya que podrían ahorrarse grandes problemas como los que sean venido presentando.
Los nuevos Galaxy Note 7 a prueba de fallas, tendrán por defecto el medidor de batería color verde; lo cual indica que los usuarios, pueden estar completamente seguros de que su phablet, no representará una amenaza.