Las agencias de noticias nacionales de China se encuentran bajo advertencia por la administración del ciberespacio del país. La medida prohibirles el uso de cualquier tipo de medios sociales como fuente para informar; siempre y cuando no haya sido estrictamente verificada la veracidad de la información.
Este tipo de prohibición podría considerarse como un claro ataque a la libertad de expresión; pero, en el caso del gobierno de China y su claro deseo de tener el control total, no resulta extraña la acción tomada. Este anuncio, se realizó a menos de una semana después de la designación de un nuevo jefe del organismo regulador. Esta declaración se encuentra fundamentada en una serie de historias. Todas estas son aseguradas como todas falsas, publicadas en sitios populares como Weibo y WeChat.
Específicamente, menciono que tenían prohibido usar rumores o simples habladurías, para crear alguna noticia; y, mucho menos, utilizar la imaginación para distorsionar los hechos. En cierto punto, esto puede ser comprensivo. Es importante, a la hora de dar cualquier tipo de noticia, ofrecer información justa, veraz, y objetiva. Además de asegurarse de primera mano que la fuente es confiable.
El régimen de China pide respeto a las medidas tomadas
Sin embargo, el tono en el que el gobierno de China realiza el anuncio, suena claramente como una amenaza. Llaman a los medios de comunicación, a confirmar que de verdad poseen mecanismos internos sólidos, para evitar cualquier tipo de información falsa. En caso de que violen la prohibición, la administración del ciberespacio tiene preparado duros castigos. Además, que ahora con apoyo de la fuerza de los inspectores de internet, pueden asegurar que se cumpla la ordenanza.
No es la primera vez que, el gobierno de China lanza una medida para censurar los medios. Poseen Firewalls, dispuestos a bloquear cualquier sitio que se encuentre en la lista negra del gobierno. Al parecer, el gobierno chino también se encuentra preparando algunas leyes nuevas. Estas se encuentran dispuestas para prohibir a cualquier medio extranjero publicar información relacionada con el gobierno, sin antes estar previamente aprobada por el estado.