Muchas personas tienen la costumbre de leer en la cama antes de dormir. Es una costumbre sana, pero debido al cambio de hábitos puede que ahora sea menos sana que nunca.
Antes todo el mundo leía libros de papel, pues eran los únicos que había. Sin embargo, desde hace unos años muchos se han pasado al libro electrónico por comodidad.
En un principio, para leer libros electrónicos nos hacía falta un ereader, pero ahora también podemos leer en nuestras tablets y en nuestros smartphones, los cuales tienen una pantalla que emite luz, a diferencia de los ereaders.
Para dormir, nuestro cuerpo necesita que haya poca luz. Por eso, cuando leemos en pantallas retroiluminadas, como las de los móviles y las de las tablets, estamos haciendo algo que va contra nuestra naturaleza.
Unos científicos han hecho un estudio, cuyos resultados son sorprendentes. Las personas que leían en estos dispositivos tenían los niveles de melatonina, una hormona que controla el sueño, más bajos que aquellos que leían libros en papel o en ereaders.
Además, los primeros tardaban unos diez minutos más en conciliar el sueño que los segundos y dormían algo menos, por lo que parece que las pantallas con luz sí que afectan al sueño.
Si eres de los que lees antes de irte a dormir, lo mejor es que lo hagas en un ereader o en un libro normal. De todas maneras, si lees en una pantalla con luz y no notas nada puedes seguir leyendo como hasta ahora.
Eso sí, si tardas en conciliar el sueño y leer en pantallas con luz, quizá la causa sea esa, así que puedes hacer la prueba durante unos días para ver si duermes mejor eliminando el hábito de leer de esa forma.
La tecnología nos ha facilitado mucho las cosas, pero a veces perjudica la salud, como en este caso.